Por Víctor O. Gómez CasanovaHoy se celebra en la República Dominicana el Día del Poder Judicial, y a propósito de esta conmemoración, nunca olvido que hace unos años, mientras tenía el privilegio de vivir y estudiar en el Vaticano, leí unas frases de varios Papas sobre el tema de la JUSTICIA. Y al ver tantas expresiones de varios de ellos, todos refiriéndose al mismo tema, me llamaba poderosamente la atención como vinculaban ellos la JUSTICIA con la Paz. Aquí les comparto tres frases de las tantas qué hay en el Vaticano sobre diversos Papas hablando de la JUSTICIA y su vinculación con la paz. Juan XXIII dijo: ”La JUSTICIA se defiende con la razón y no con las armas. No se pierde nada con la paz y puede perderse todo con la guerra”; Pablo VI dijo: ”Si quieres la paz, lucha por la JUSTICIA”; Y Juan Pablo II fue más lejos y se refirió también al perdón, cuando sentenció: ”No hay paz sin JUSTICIA, no hay JUSTICIA sin perdón”. Esto me hace invitarles a que reflexionemos hoy, Día de la JUSTICIA en nuestro país, sobre la importancia de la JUSTICIA en nosotros mismos, en nuestras acciones, en nuestro comportamiento, en nuestras vidas y cómo afecta nuestras relaciones y las vidas de nuestros familiares, de nuestros seres queridos y de las personas que nos rodean. La JUSTICIA no puede ser vista solamente como un Juez, una Corte, un estrado, el Ministerio Público y los abogados de las partes en litigio. ¡No! Reflexionemos sobre la JUSTICIA en el comportamiento de nosotros mismos. ¿Cuántas veces juzgamos a otra persona sin ponernos en sus zapatos y sin saber la realidad y las interioridades de sus situaciones? ¿Es eso justo? ¿Es eso JUSTICIA? ¿Cuántas veces repetimos lo que escuchamos que otra persona nos contó o dijo delante de nosotros, sin saber si es cierto y lo damos por hecho con una seguridad como que a nosotros nos consta o como que estábamos ahí y fuimos testigos y lo vimos? ¿Es eso justo? ¿Es eso JUSTICIA? ¿Cuántas veces asumimos a priori y juzgamos internamente a otras personas por su apariencia, por su color de piel, por su religión, por su preferencia sexual, por su origen social, por la ropa que llevan puesta, por su nacionalidad, por sus palabras o por su manera de expresarse? ¿Es eso justo? ¿Es eso JUSTICIA? ¿Cuántas veces criticamos y acusamos a otras personas de hacer mal lo que nosotros hacemos de manera igual? ¿O censuramos y criticamos a un familiar, a una amistad cercana o hasta un vecino por reaccionar o hacer con sus hijos lo que creemos que está mal para ellos, pero no nos fijamos en que nosotros lo hacemos igual y hasta peor con los nuestros? Ah, pero es que los ojos no ven hacia adentro. Es como dice la Biblia en el Evangelio de Lucas, Capítulo 6, versículo 41 ”ver la paja en el ojo ajeno y no ver la viga en nuestro propio ojo”. ¿Es eso justo? ¿Es eso JUSTICIA? A muchas personas en este mundo de hoy les falta paz, porque no son justos, porque les falta JUSTICIA. Les invito a que reflexionemos sobre la condición de Jueces y Juezas que nos gusta autoproclamarnos y verificar si ese afán de querer juzgar al otro, nos trae la paz que decimos desear. La JUSTICIA tiene que empezar por nosotros mismos, por eso bien lo dijo nuestro Padre de la Patria Juan Pablo Duarte: ”Sed justos lo primero, si queréis ser felices” porque evidentemente que sin JUSTICIA no hay paz y tampoco felicidad. Lluvias de Bendiciones para UDS, sus familiares y todos sus seres queridos. ¡Gracias por leerme y Feliz Día del Poder Judicial! Nota: A propósito de JUSTICIA, les recomiendo esta película. Ojalá puedan verla en familia, en compañía de sus padres e hijos.
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Diciembre 2020
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